Todas las joyas van sufriendo un desgaste continuado como consecuencia principalmente de dos factores:
- El paso del tiempo. Las joyas sufren un deterioro inevitable a medida que pasan los años que provoca, por ejemplo, que la plata se oxide o que en las piezas de oro blanco se vaya perdiendo el baño de rodio, etc
- El uso. Las joyas son propensas a sufrir golpes, se rayan, se tienen que adaptar a nuevas medidas, etc que provocan un deterioro de las mismas
Por eso es necesaria la conservación y el mantenimiento de joyas. Para evitar el desgaste de las joyas es importante cuidarlas, protegerlas y mantenerlas adecuadamente, pero también es imprescindible ir realizando una revisión periódica de las mismas a fin de asegurar su correcta conservación y mantener su esplendor inicial a lo largo de los años. Algunas de las tareas que se realizan en una revisión para la conservación y mantenimiento de joyas son:
- Limpieza y pulido de las piezas
- Reposición de gemas perdidas o rotas
- Achicar o agrandar sortijas, pulseras o cadenas
- Transformaciones de joyas en general